La remuneración del empleado y los tipos que existen

19 de octubre, 2022

Una de las claves del éxito es acertar con el modelo de remuneración de la empresa. Se trata de un elemento fundamental a la hora de armar un equipo y retener el talento.

También es un reclamo más cuando se trata de atraer talento. Recursos Humanos deberían poner especial énfasis en esta cuestión.

Es importante señalar que remuneración y salario no es lo mismo. A menudo son conceptos que se confunden, un error que deberíamos evitar.

El salario es un fijo a final de mes, la remuneración va mucho más allá. De hecho, encontramos diferentes tipos de remuneración que amplían nuestras opciones.

¿Qué es la remuneración?

La remuneración es la retribución que percibe un trabajador a cambio de un servicio.

Dentro de este concepto se engloban el salario y otras compensaciones que puede percibir el empleado. Y esta es la clave del concepto. La remuneración permite complementar o ampliar el sueldo.

No son pocas las empresas que cuentan con un sistema de remuneraciones, donde se especifican las compensaciones a las que tienen acceso los trabajadores.

La remuneración puede depender de aspectos como la productividad, esfuerzo, capacidad, responsabilidad… La remuneración queda reflejada en el contrato de trabajo.

¿Qué tipos de remuneración puedo ofrecer?

A la hora de diseñar el sistema de remuneración de tu empresa, tienes múltiples opciones. Es más, no tienes por qué centrarte en un único modelo. Se pueden combinar diferentes tipos de remuneración si se da el caso.

A la hora de elegir tipo de remuneración, te recomendamos seguir estos consejos:

• Conocer a fondo las características de la empresa: así sabrás si tiene sentido introducir una retribución variables, o compensar con un sueldo fijo. También conocerás las posibilidades de la empresa a la hora de implantar el modelo de retribución.
• Análisis del mercado laboral: si quieres atraer y retener talento mediante la retribución, tendrás que conocer la situación del sector. Puede ser una referencia, un punto de partida que te permita destacar sobre la competencia.
• Análisis del presupuesto: también deberás analizar el presupuesto para remuneración. Hay que ser realistas y ofrecer un sueldo y unos beneficios para el empleado que podamos permitirnos. En ningún caso puedes pagar más de lo que se puede permitir el negocio.
• El rendimiento de los equipos: una buena opción es ofrecer diferentes tipos de remuneración en función del rendimiento. Los bonos o comisiones permiten motivar a la plantilla a contribuir a los objetivos de la plantilla.
• Ubicación del equipo: si tienes empleados en remoto en otros países, puedes gestionar la remuneración en función del coste de vida allí donde están. Ten en cuenta que también deberás respetar la legislación local.

Tipos de remuneración: el salario

Ya hemos dicho que salario y remuneración no es lo mismo. Sin embargo, el salario es la forma de remuneración más común.

Hay varios tipos de salario en función de su periodicidad (mensual, quincenal, jornal), componentes (base, integral) o impuestos y retenciones (bruto, neto).

También podemos diferenciar los tipos de salario según los criterios del cobro.

El salario fijo es una cantidad que se mantiene inalterable en relación a la eficiencia. En cambio, el salario variable depende de la productividad del trabajador. Por último, el salario mixto es la suma de determinadas variables a la cuota fija.

El salario en especie

Cuando el trabajador recibe el salario en dinero, hablamos de salario monetario.

Pero también puede percibir recompensas no económicas por su trabajo. En ese caso, hablamos de salario en especie. Es un ejemplo de retribución flexible, y no puede representar más del 30% del salario total.

Este tipo de remuneración incluye beneficios como coche de empresa, cheque comedor, seguros médicos, participaciones en la empresa, gastos de residencia…

Eso sí, a efectos fiscales aparece recogido y computado como retribución económica.

Beneficios en la remuneración: obligatorios y no obligatorios

Los beneficios obligatorios no dejan de ser las compensaciones integradas en el salario.

Son un derecho de los trabajadores, y entre ellos se incluyen las cotizaciones por baja laboral o desempleo, jubilación, etc. Forman parte de la remuneración, y se calculan como porcentaje de la retribución. Se incluyen en el salario bruto.

En cambio, los beneficios no obligatorios son las remuneraciones adicionales que completan el salario.

Ninguna ley nos obliga a ofrecerlos, pero hacerlo nos ayuda a reforzar el atractivo de nuestra empresa para el talento. Aquí sí que podemos hablar de remuneración pura y dura.

Dentro de los beneficios no obligatorios tenemos infinitas opciones. Tiempo libre pagado, horario flexible, programas de salud y bienestar, seguro médico o coberturas ampliadas, ayudas para la formación del empleado o el cuidado de los hijos.

Honorarios

Se trata de un tipo de remuneración que se ofrece a cambio de un servicio.

A diferencia de lo que pasa con el salario, la relación de trabajo no es de subordinación. Un profesional ofrece sus servicios a una empresa o persona, y esta abona un monto en forma de honorarios.

Sobresueldo

El último tipo de remuneración corresponde a los sobresueldos. Se trata de una remuneración extra en forma de incentivo, aunque también puede corresponder a las horas extra.

También funciona a modo de complemento del salario base, por ejemplo los bonos o incentivos.

Disponer de un software de recursos humanos como Sesame HR puede marcar la diferencia a la hora de diseñar el programa de remuneración y retener el talento. Sobre todo, a la hora de analizar el rendimiento de los trabajadores, aplicar bonus por rendimiento, etc.

Gracias a la función de control horario, también podrás llevar un control de las horas extras o de las ausencias de tu plantilla.

Sin olvidar que nos ayuda a gestionar proyectos, los procesos de selección, onboarding y offboarding, etc. Una ayuda para que RRHH se centre en la gestión del día a día.

Si quieres saber más sobre la remuneración y atracción de talento, no te pierdas el resto de contenidos del blog de Sesame HR.